Nacer de nuevo
Nicodemo, este hombre es bien
conocido en aquellos tiempos ya que, según la Palabra de Dios, era un maestro de
Israel, es decir preparado en las enseñanzas de la Biblia, por lo menos en el
Pentateuco.
Nicodemo llegó donde Jesús y le
reconoce como un hombre que verdaderamente venía de Dios ya que, hacia señales
milagrosas, y estas señales no se pueden realizar si no se viene de Dios.
Entonces Jesús lo confirma
afirmando que hay que nacer de nuevo para ver el reino de Dios, el asunto es la
implicación que esto conlleva, es decir, nacer de nuevo, no solamente es
decirlo o experimentar un primer amor, nacer de nuevo es algo que se vive cada
día. (Juan 3:1-8)
Jesús le dice a Nicodemo que
tiene que nacer de nuevo del agua y del Espíritu para poder entrar en el reino
de Dios, es aquí donde le está confirmando que tiene que nacer de nuevo, es
decir, aunque ya este hombre era preparado en las cosas de Dios, le faltaba
algo más. Pasa mucho dentro del ámbito cristiano, y dentro de la población en
general, algunos dicen creer en Dios y hasta le bendicen, hoy en día es como
una muletilla decir “bendiciones”, en los programas de televisión están implementando
esta muletilla, pero el asunto es la trascendencia de esto en sus propias vidas
ya que la Palabra afirma que no todo aquel que dice Señor, Señor entrará en el
reino de los Cielos. (Mateo 7:21) Y si ahora hablamos del ámbito meramente
cristiano, ocurre igual, aquí la exigencia de Dios es mucho mayor, por razones
obvias.
Gálatas capítulo 5 en el verso 16,
Pablo nos exhorta a andar en el Espíritu, no satisfaciendo los deseos de la
carne. A esto me refiero, entonces nacer de nuevo implica andar en el espíritu,
andar es un término según el diccionario de la Real Academia Española que es ir
de un lugar a otro dando pasos, eso es lo que Dios quiere y nos enseña que
siendo cristianos a diario en cada paso que demos desde que nos levantamos
hasta que nos acostamos sea todo en el Espíritu y si esto es así, entonces no
hay satisfacción para los deseos de la carne, a lo malo le decimos NO y
entonces comenzamos a producir buenos frutos.
Cada día que nos levantamos es
una oportunidad más para que esto lo vivamos, alegremente y recurriendo a aquél
que es el único que tiene palabras vida eterna (Juan 6:68)
Job 8:5-8
“Si
tú de mañana buscares a Dios, y rogares al Todopoderoso; si fueres limpio y
recto, ciertamente luego se despertará por ti, y hará próspera la morada de tu
justicia. Y aunque tu principio haya sido pequeño, tu postrer estado será muy
grande.”
Marco Rivera